Reporte de alimentación balanceada

Resumen de los hallazgos:

Entorno:

El equipo de La Tv Calle en Nueva Esparta realizó una encuesta en el periodo de abril 2022 – mayo 2022. Con la finalidad de evaluar el sistema de alimentación balanceada que manejan las familias en la entidad insular, empleando una serie de indicadores vinculados con la seguridad alimentaria, el consumo de alimentos, el salario de los venezolanos y las políticas ineficaces que ha implementado el Estado para brindar condiciones de vida óptima al ciudadano.

Se empleó un muestreo aleatorio de personas, no probabilístico, enfocado específicamente en grupos familiares de los 11 municipios de la entidad Insular. Logrando un alcance superior a 200 personas que respondieron una serie de preguntas cerradas y abiertas referentes a su sistema de alimentación en el día a día. En Nueva Esparta se hicieron específicamente más de 140 encuestas, distribuidas en los municipios Gómez, Maneiro, Mariño, Marcano, Diaz, García y Arismendi.

Sistema de alimentación balanceada y acceso a las calorías correspondientes para los venezolanos – Marianella Herrera Cuenca

Una alimentación equilibrada debe incluir los tres grupos de alimentos básicos, constituido por los carbohidratos, proteínas y grasas, a partir de esto se puede conformar una fórmula calórica donde se cubren las necesidades de cada individuo. “En Venezuela, la recomendación existente del nivel de consumo de calorías promedio correcto debería ser de 2300 calorías diarias; abarcando el 15% de proteínas, el 55% de carbohidratos y el 30% sean de grasas” comentó ante La Tv Calle la Dra. Marianella Herrera Cuenca directora del Observatorio Venezolano de Salud.

Cuando ya se posee esta distribución, se tiene la posibilidad de acudir a la variedad dentro de la dieta, agregando frutas, vegetales, cereales integrales, panes integrales, pastas integrales y demás bajo condiciones de un país cuyo contexto sea el ideal a nivel social y financiero. También en el panorama social y económico ideal, el consumo equilibrado de alimentos del venezolano promedio debería ser: pollo, pescado, leche y las grasas que estarían divididas en un 10% saturadas, 10% insaturadas, 10% monoinsaturadas.

Aunque este tipo de recomendaciones son de carácter subjetivo porque las personas deben adaptarlos a su realidad. Por ejemplo, una persona con diabetes debe manejar una variación en el tipo de alimentos que consume según su condición clínica que este presenta, ya que no requiere de la misma cantidad de nutrientes o vitaminas que un paciente totalmente sano. Igualmente ocurre con los niños, adolescentes o adultos mayores que generan una demanda distinta referente a este tipo de recomendaciones.La gran mayoría de los encuestados por La TV Calle señalaron que no manejan un sistema de alimentación balanceada en su día a día, específicamente el 84,8% de las personas consultadas presentan un desequilibrio alimenticio y un 15,2% disponen de una alimentación balanceada en sus hogares.

Alimentación Balanceada en el contexto actual de Venezuela – Marianella Herrera Cuenca y Patricia Manuitt.

“Los venezolanos actualmente no pueden cubrir la demanda de nutrientes o calorías que se requieren para un ritmo de vida cuya alimentación sea balanceada, el salario mínimo y aquellos que no son tan mínimos igualmente presentan una brecha enorme con el costo de la canasta básica en el país” señaló la directoria del Observatorio Venezolano de Salud.

El 91,7% de los encuestados considera que el salario no les alcanza para costear un nivel de comida balanceado donde se pueda consumir una serie de productos, sin embargo, el 8,3% afirma que puede abordar dentro de sus mercados mensuales la compra de carne, pollo, pescado, carbohidratos, lácteos, embutidos, frutas y demás.

Según el Centro de documentación y Análisis para los Trabajadores (CENDAS) sitúa La canasta alimentaria para un núcleo familiar de 5 personas en el mes de marzo del 2022 tuvo un costo de Bs.1.503,72 que equivale con base en la tasa actual de cambio del BCV 347,68 dólares americanos.

Sin embargo, el Centro de documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (CENDAS-FVM) registró para el mes de abril de 2022 el costo de la canasta alimentaria familiar constituido por 60 productos en Bs. 2.115,50 que equivale según la tasa del BCV a un precio de 471, 16 dólares americanos. Registrando un aumento del 3,6% en comparación con el mes de febrero.

El principal problema hace algunos años atrás era la escasez de alimentos, pero en la actualidad se presentan brechas enormes entre el salario de un venezolano común con la realidad que se observa en la canasta alimentaria de Venezuela, es decir, existe un alto índice de desproporcionalidad entre el salario mínimo y el mercado que puede realizar una familia de cuatro personas para subsistir ante la crisis del país.

Un mercado promedio en Venezuela con el salario mínimo.

Una persona promedio cuyos ingresos equivalen al salario mínimo mensual en el estado Nueva Esparta, puede hacer un mercado constituido por solamente 13 productos que suelen durar una semana en un hogar cuyo núcleo familiar este conformado por 4 personas. Salario mínimo 130 bs – $28 aproximadamente al cambio.

Los locales comerciales dentro de las poblaciones rurales comentan ante La TV Calle que los margariteños suelen efectuar en su mayoría compras para el día y muy pocos suelen efectuar compras superiores a los 50 bs en un día, que sería el equivalente a 10 dólares americanos según la tasa de cambio en el país.

En este tipo de mercado se puede ver cómo no se sostiene un equilibrio entre los alimentos según las recomendaciones a nivel nacional por especialistas. Un grupo familiar en el país suele presentar grandes dificultades para abordar al menos una parte de las 2300 calorías ideales para un ciudadano promedio en el territorio nacional.

También, los comerciantes, emprendedores y empresarios señalan que las compras en la actualidad de los usuarios en la entidad insular suelen ser por pequeñas porciones, “es muy raro cuando una persona se lleva algún producto por kilo, lo que más vendemos acá es harina pan y jamón, pero siempre compran en pequeñas cantidades por los bajos recursos que poseen” dijo Carmen Marcano dueña de un mini market en la población de El Maco.

Asimismo, el equipo de La TV Calle monitoreo durante dos semanas las compras en diferentes locales en el municipio Marcano, Gómez y Mariño, con el objetivo de identificar cuáles son los productos con mayor demanda, los métodos de pago y la fluidez que posee la actividad comercial en este sector de la Isla.

El producto con mayor demanda dentro de la comunidad neoespartana suele ser la harina pan, aproximadamente 40 de cada 55 personas que suelen visitar un local en el municipio Marcano compran harina de maíz. Aunque en algunos casos se inclinan hacia la harina de trigo como una alternativa para subsistir en Venezuela.

En las poblaciones rurales del estado Nueva Esparta en el municipio Gómez, aproximadamente 40 personas de forma fija compran pan para la hora de la cena como un suplente de la harina pan, también agregan a sus compras pequeñas porciones de mortadela o jamón. Cabe destacar, que una persona con este ritmo de vida suele gastar a diario entre dos a tres dólares americanos para poder cenar.

En cambio, otros omiten un plato de comida al día para ahorrar al momento de sus compras, prefiriendo desayunar en horas del mediodía y cenar con platos de comida pesados, ya que no cuentan con recursos financieros para costear los 3 platos básicos de comida en el día a día.

El 100% de las personas encuestadas por el equipo de La TV Calle, determinó que no todas las personas no pueden acceder en Venezuela a los tres platos de comida diario con el reciente aumento salarial (Desayuno, Almuerzo y Cena), demostrando la proporcionalidad existente entre los ingresos de los trabajadores y la canasta alimentaria en la entidad Insular.

Por esta razón, cientos de familias en Nueva Esparta acuden a las bodegas o locales a diario para comprar harina de maíz, porciones pequeñas de jamón o queso, casabe, hortalizas o legumbres que les permite armar al menos dos platos de comida en su hogar.

Por ello, los margariteños, al igual que los venezolanos ubicados en las demás regiones del país, se ven en la obligación de efectuar inversiones a diario en alimentos.

Los margariteños deben tener hasta tres empleos para lograr costear una parte de la canasta alimentaria en Venezuela, 8 de cada 10 personas que compraba en estos locales generan ingresos a través de alternativas formales e informales que les permite adquirir recursos para subsistir semanalmente en la entidad Insular.

Un salario de 130 bolívares no alcanza para vivir en Venezuela.

El reciente aumento salarial publicado en gaceta oficial  Nro° 6.691 establece el salario mínimo en el país en 130 bs. D que equivale a 28 dólares americanos según la tasa del cambio del día manejada por el Banco Central de Venezuela.

Por lo mismo, se realizó una consulta a diferentes integrantes de distintas comunidades del estado Nueva Esparta para constatar si con el incremento salarial del mes de marzo pueden abordar necesidades como el agua, la electricidad, transporte público, medicamentos, equipos de higiene, ropa, accesorios y demás.

El 100% de los encuestados calificó este incremento salarial como insuficiente para lograr cubrir ciertas necesidades en su día a día. La cantidad de 130 bolívares permite a un venezolano promedio subsistir una semana en el país de manera muy precaria o limitada, presentando dificultades para abordar las 2300 calorías ideales para cualquier persona en este país.

¿Cuál producto es más accesible para el venezolano en la actualidad?

Al instante de efectuar la encuesta, las personas realizaron una serie de comentarios acerca del tipo de producto más accesible para ellos al momento de realizar sus compras, categorizando los mismos de la siguiente manera:

¿Cómo sería un menú ideal para los venezolanos bajo un contexto de crisis humanitaria compleja?

Desde la llegada de la crisis a Venezuela, los venezolanos han tenido que ingeniarse diferentes métodos para la construcción de un menú balanceado, teniendo que desarrollar este bajo un contexto lleno de dificultades para acceder a los tres grupos básicos del campo de alimentos.

Asimismo, empiezan a comer en exceso ciertas cosas, aunque les brinda beneficios en ciertos aspectos, ya que las personas ingieren legumbres o carbohidratos como el arroz para disfrutar de ciertos nutrientes. Lo que demuestra que más allá de la situación precaria de ciertos hogares las familias realizan el esfuerzo para disponer de ciertos nutrientes.

También, los niños en las escuelas padecen las consecuencias de no tener una alimentación balanceada, “la falta de vitamina A afecta la visión, la falta de vitamina B afecta el desarrollo psicomotor de las personas y en el aprendizaje es donde suele verse las brechas porque la carencia de ciertos elementos en nuestros cuerpos limita nuestro crecimiento” afirma Patricia Manuitt doctora en biología celular y molecular.

Los jóvenes con el tiempo pueden desarrollar diferentes problemas de crecimiento, lo que obstruye el crecimiento de las personas a nivel físico, los resultados presentados del 91% de inseguridad alimentaria demuestra que el 90% de la población está propenso a enfermedades o altos riesgos.

“Desde la llegada de la pandemia, de aquí a 10 años, nuestro rendimiento académico en Venezuela va a disminuir de manera significativa porque los problemas de nutrición y las dificultades derivadas de la pandemia influye en la academia venezolana” dijo la Patricia Manuitt doctora en biología celular y molecular.

¿Cuáles son los factores que influyen en la selección de alimentos en Venezuela?

La seguridad alimentaria presenta cuatro pilares fundamentales, entre estos las condiciones de vida de las personas, tal como sucede cuando un sujeto dispone de un paquete de caraotas para comer y no cuenta con gas doméstico, agua potable con características adecuadas o un sistema eléctrico ideal.

“¿Cómo hago yo para cocinar un paquete de caraota cuando no tengo agua o gas en mi casa? Este tipo de cosas también influyen en la selección de los alimentos para mantener un ritmo balanceado de vida en el día a día” señaló Marianella Herrera en una entrevista en exclusiva ante La TV Calle.

La directora del Observatorio Venezolano de Salud no solamente resaltó el papel protagónico de los servicios públicos para manejar un buen ritmo de alimentación en el día a día, también destacó el factor antropológico que influye en la selección de alimentos. Por ejemplo, aquellas preferencias culturales de las comunidades, como se observa con el maíz pilado y la elaboración de la arepa.

El principal problema para los venezolanos en cada una de las regiones del país es que se encuentran limitados para conseguir acceder a los alimentos porque no cuentan con los recursos para costear las demandas que suelen presentarse en su día a día. Esto ha traído como consecuencias que las personas tengan que abandonar sus tradiciones culinarias o la perdida de la identidad en ciertas regiones del territorio nacional.

En Nueva Esparta diferentes familias durante la época de semana santa presentan costumbres culinarias como la elaboración del tradicional pastel de chucho o raya para aquellos días en los que no se debe consumir carne roja o algún tipo de carne. 

Este año diferentes hogares en la entidad insular han tenido que dejar a un lado sus tradiciones o costumbres, en vista que no cuentan con los recursos suficientes para pagar los ingredientes que acarrea este tipo de platillos. Aunque otros han preferido descartar este tipo de tradiciones por la carencia de recursos financieros en sus hogares, abandonando sus derechos culturales como consecuencia de la crisis que enfrenta el país. Además, el abandono de este tipo de culturas acarrea implicaciones psicológicas en los adultos mayores. Ya que la proliferación de barreras para efectuar este tipo de acciones se ha convertido en la principal causa para que los margariteños entren en pequeños cuadros depresivos o de tristeza que impide el desarrollo de una vida digna en su mayor plenitud.

Consecuencias de sostener una alimentación desequilibrada o con varias carencias.

En el caso de los adultos mayores, estos suelen entrar en periodos continuos de fatiga, cansancio o sueño que obstaculizan su rendimiento en el día a día, algunos hasta se vuelven anémicos con el tiempo y entran en cuadros de inseguridad alimentaria.

También, el estrés es un factor que influye de manera significativa en la vida de los venezolanos, las preocupaciones y saturación de compromisos ha impedido que las personas cumplan con una dieta balanceada en su ritmo de vida.

“La carencia de una alimentación equilibrada se vuelve un elemento estimulante para que los índices de estrés asciendan de manera significativa en los hogares venezolanos, lo que demuestra las causas que la cantidad de accidentes cerebrovasculares, problemas de coagulación y dificultades en el corazón incrementen en el país” comentó ante la Tv Calle la directora del Observatorio Venezolano de Salud. Asimismo, se presentan casos de desnutrición crónica que se vive en algunos hogares en Venezuela, lo que trae consigo una serie de problemas cognitivos, psicomotores y demás discapacidades que impiden que las personas puedan sostener un ritmo de vida adecuado o que mantengan un alto rendimiento en sus campos de acción, tal como sucede con los niños en la etapa escolar, los cuales han disminuido su nivel académico por no contar con los tres platos de comida en su día a día.

Beneficios sociales que no brindan protección a las comunidades.

A partir del mes de abril del 2016 se da inicio por parte del gobierno nacional un programa social denominado CLAP, donde brindan de forma económica ciertos productos de la canasta alimentaria a los venezolanos, siendo esta una presunta medida para combatir la crisis económica del país.

Desde el establecimiento del Comité Local de Abastecimiento y Producción (CLAP) se ha visto el desarrollo de una campaña populista de la mano de los consejos comunales para garantizar “seguridad alimentaria” a la población bajo el contexto de crisis que enfrenta el país. Pero, esta medida ha presentado un conjunto de irregularidades que impiden al venezolano acceder a este beneficio social, ya que existe un número amplio de familias en el caso de la entidad Insular que no logran disponer de esta clase de bolsas o cajas de alimentos y los que pueden adquirir la misma determinan que solo les dura un par de días y no les brinda seguridad alimentaria durante todo un mes como lo promociona el gobierno nacional.

El 100% de las personas encuestadas arrojaron una respuesta negativa ante la consulta, negando que esta clase de beneficios pueden durar hasta un mes en sus hogares conformados por cuatro familiares o más.

“Estamos hablando de una caja que dura específicamente una semana como máximo. Porque, las personas de forma ingenua piensan que este beneficio puede ayudar en algo, cuando la realidad es que este tipo de acciones no cubren las necesidades de los venezolanos y solo duran un par de días” indicó Marianella Herrera Cuenca.

Asimismo, el equipo de La TV Calle durante su consulta preguntó si este servicio es regular, mensual, quincenal o más, el 45,6% de los encuestados respondieron que nunca han disfrutado de una caja CLAP, el 31,9% señalaron que acceden a esta caja de manera mensual.

Sin embargo, el 3,9% de los encuestados percibe este beneficio quincenal, pero el resto de los consultados rechazaron este programa social, otros expusieron que perciben la misma pero cada 3 o 6 meses, mientras que algunos calificaron la caja CLAP como una especie de chantaje para que la población se mantenga apoyando las ideologías vinculadas al gobierno nacional.

Conclusiones:

En Venezuela se vive un grado amplio de inseguridad alimentaria, las personas no disponen de un nivel balanceado de alimentación, carecen de recursos para costear el promedio de calorías recomendable para los venezolanos en la actualidad. El salario mínimo mensual presenta una clara desproporcionalidad con la realidad de los venezolanos, lo que estanca el desarrollo de cientos de personas en diferentes aspectos dentro de la sociedad.

El 84,8% de las personas consultadas por La TV Calle presentan un desequilibrio alimenticio dentro de una muestra superior a 150 personas pertenecientes al estado Nueva Esparta. Además, el 91,7% de los encuestados considera que el salario no les alcanza para costear un nivel de comida balanceado donde se pueda consumir una serie de productos que formen parte de los tres grupos alimenticios recomendados para llevar un buen ritmo de vida en el país.

Asimismo, posterior al monitoreo de compras efectuado por La TV Calle en distintas comunidades se puede ver como no se sostiene un equilibrio entre los alimentos según las recomendaciones a nivel nacional por especialistas, un grupo familiar en el país suele presentar grandes dificultades para abordar al menos una parte de las 2300 calorías ideales para un ciudadano promedio en el territorio nacional.

El principal problema para los venezolanos en cada una de las regiones del país es que se encuentran limitados para conseguir acceder a los alimentos porque no cuentan con los recursos para costear las demandas que suelen presentarse en su día a día. Esto ha traído como consecuencias que las personas tengan que abandonar sus tradiciones culinarias o la perdida de la identidad en ciertas regiones del territorio nacional, convirtiéndose en una clara transgresión de los derechos culturales de los venezolanos.

Las consecuencias de una alimentación poco balanceada, afecta a los adultos mayores, estos suelen entrar en periodos continuos de fatiga, cansancio o sueño que obstaculizan su rendimiento en el día a día. De la misma forma, impide que los niños puedan desarrollar habilidades cognitivas de manera adecuada y mantengan niveles altos académicos durante sus diferentes niveles de formación en las instituciones educativas del país.

Finalmente, la principal razón para que las familias en Venezuela presenten problemas de alimentación balanceada deriva de la carencia de recursos para costear la canasta alimentaria del país, además los venezolanos se han vuelto víctimas constantes de vulneración al derecho a la alimentación y todos los derechos ligados de forma interdependiente a este.

Reporte de alimentación balanceada
Image

La TV Calle

Ayúdanos a llegar a más personas.
¡Comparte este contenido!

Share on twitter
Share on facebook
Share on whatsapp
Share on email
0 0 votos
Article Rating
Suscribir
Notificar de
guest

1 Comment
Más antiguo
El mas nuevo Más votado
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
Alejandro

La buena alimentación en Venezuela es un mito. A nadie le alcanza para cubrir la cesta básica