Diversos casos de presos políticos de Mérida siguen siendo objeto de irregularidades. Por un lado y por tercera vez, se suspendió la audiencia de conclusiones de Marller González y Walter Mayorga, detenidos hace más de seis años en Mérida. Por otro lado, Stiven García, también preso político, espera que el juez dicte sentencia en su caso.
Caso de Marller González y Walter Mayorga
Extraoficialmente, por problemas de salud del juez, se volvió a diferir la audiencia de estos presos políticos de Mérida. Nelson Rivas, investigador del Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad de Los Andes, recordó que se ha cancelado tres veces la audiencia de conclusiones por arbitrariedades del poder judicial.
«Este proceso lleno de arbitrariedades coincide con el patrón que ha señalado la Misión Internacional Independiente de los Hechos. Pues, indican que jueces y fiscales se han puesto de acuerdo para reprimir judicialmente a estas personas que participaron en las protestas del año 2014», comentó al profesor.
En el caso de González y Mayorga, Rivas explicó las irregularidades que se han vivido. «Estas múltiples arbitrariedades ha traído como consecuencia que el juicio se alargue más de lo necesario, sin tener pruebas ni testimonios. Estos jóvenes han estado en prisión preventiva más tiempo de lo que estipula es Código Penal», aseguró el investigador de Derechos Humanos.
Caso de Stiven García
Por su parte, el abogado indicó que las excusas son diversas y «absurdas» en el caso de Stiven García. Denunció que las autoridades están evitando la continuación del proceso por situaciones que no se deberían presentar. En este sentido, argumentó que, en audiencias pasadas, se le avisó a la Fiscalía que debían presentar las conclusiones del caso para dictar sentencia en el día pautado.
Sin embargo, en la audiencia de conclusiones de García, el fiscal encargado alegó que no tenía listas las mismas. Es decir, «no hizo la tarea» y por ende se retrasó otra semana la presentación. El la siguiente audiencia la Fiscalía expuso sus puntos, no obstante, «no dio tiempo» para presentar las conclusiones de la defensa. Acto seguido se diferió nuevamente.
Ante esta situación, Lino García, padre del preso político Stiven García, espera que el juez dicte sentencia en favor del joven caraqueño, acusado sin pruebas contundentes de un asesinato durante las protestas del 2014.
El señor indicó que toda la familia ha sufrido por la situación del joven y que viven en incertidumbre cada día por las arbitrariedades que se han presentado en el caso. A más de 6 años de iniciado el proceso, García aún no tiene sentencia.
«Ya le han diferido la audiencia de conclusiones dos veces y nada. Estamos esperando que salga en libertad porque no tienen nada en su contra. Stiven es un muchacho inocente a quien se le truncó el futuro», comentó el padre.
En este sentido, aseguró que el actual preso político es un joven emprendedor que estudiaba para ser chef. Un hombre con talento, amante de la música, que por no apoyar al sistema político venezolano vive injusticias de gran magnitud.
Finalmente, comentó que ante la difícil situación, la madre de Stiven sufrió dos ACV. Actualmente, tiene problemas para caminar. «Ella está sufriendo. Le cuesta caminar, le cuesta hablar», aseguró el padre de uno de los presos políticos de Mérida
