El Observatorio de Derechos Humanos de la Universidad de Los Andes (ODH-ULA) denunció la crítica situación que atraviesan los jubilados universitarios. Afirmaron que tanto los profesores como el personal administrativo, técnico y obrero se encuentran desamparados por el Estado venezolano.
En el informe «Situación de los adultos mayores de la Universidad de Los Andes, Mérida-Venezuela», se evidencian que los ínfimos salarios y pensiones son totalmente «insuficientes para costear los gastos más elementales de alimentación y salud. Esta situación condena a los adultos mayores a una vejez humillante y sumergida en la miseria, absolutamente contraria a la dignidad humana».
Pronunciamiento del ODH-ULA
En este sentido, indicaron que el «misérrimo salario y la exigua protección por parte de los seguros médicos previstos», provocan la desatención a su salud. Todo, sumado a la dependencia económica de familiares, amigos, conocidos o de la «caridad pública».
Es de resaltar que la crisis humanitaria compleja en Venezuela afecta a todo trabajador universitario, activo o jubilado. En el caso de un profesor titular, mientras en enero de 2001 ganaba un salario mensual equivalente a 2.659 dólares ahora tiene un sueldo equivalente a 24,74 dólares mensuales.
Ante ello, el ODH-ULA aclaró que dicho salario está por «debajo de la línea de pobreza, situada por la ONU en menos de 1,90 diarios».
