Cada vez que llueve, los vecinos del sector 29 de Marzo, en Barcelona, estado Anzoátegui, deben tener a la mano velas, linternas y sus celulares con batería. Pues, afirman que el fenómeno atmosférico también viene con “un apagón seguro”.
Las constantes idas de luz mantienen angustiados a los habitantes de la comunidad capitalina, quienes temen que sus electrodomésticos resulten dañados por las fluctuaciones que anteceden al corte energético.
“No pueden caer tres gotas de agua porque se va la luz. Apenas comienza a llover, se registran bajones hasta que finalmente se va. Muchas veces se escucha que explotan guayas, transformadores y se salen los tabacos del poste”, dijo la señora Ana Padilla.
Pero no solo las fallas de electricidad son las que indignan a los vecinos de Barcelona, sino el tiempo que deben esperar para que las mismas se solventen. Manifestaron que Corpoelec se demora más de 48 horas (2 días) para atender los casos por falta de unidades.
“Nos estresa que llueva. Si la luz se nos va tenemos que esperar más de dos días para que vengan a arreglar eso. Los alimentos se dañan y no podemos hacer otras labores porque sin luz es casi imposible”, relató Miriam Lara, otra habitante.
Lara agregó que la última vez que pasaron por esto fue el pasado sábado 26 de febrero, cuando varias calles de la ciudad anzoatiguense resultaron inundadas por las aguas debido al fuerte aguacero. Ese día, como era de esperarse, también se quedaron sin luz.
“Se salieron unos tabacos. Llamamos a Corpoelec y nos decían que ya venían, pero era mentira. También pusieron de excusa que la calle estaba llena de agua, pero después bajó y tampoco vinieron. Nos castigaron sin luz. Pareciera que lo hacen por maldad”, expresó Lara.
Los vecinos del popular sector hacen un llamado a las autoridades competentes para que solventen las fallas de energía eléctrica que afectan a la ciudadanía cada vez que llueve. Pues, a tan solo meses de que inicie la temporada de lluvias, consideran que no están preparados para afrontarla.