Los habitantes del sur de Barquisimeto recuerdan con anhelo cuando las empresas privadas por contratos eran las encargadas de surtir sus bombonas de gas. “Solo necesitábamos llamarlos e inmediatamente nos traían nuestras bombonas de gas”, expresaron las personas pertenecientes al sector.
Al pasar los años la situación fue desmejorando, cuando la encargada de surtir el gas pasó a ser la empresa Petróleos de Venezuela S. A. (PDVSA). La tardanza para entregar las bombonas comenzó a notarse, e incluso el trámite fue más complejo para los habitantes.
Pero, fue en el último año cuando la situación de gas, en la zona sur, se convirtió en un caos. Cuando los habitantes comenzaron con la Empresa de Gas Doméstico de Lara, todo se complicó mucho más. Ya no pueden utilizar los cilindros de 43 kg porque no se los llevan hasta las respectivas casas, sino que deben trasladarse hasta el llenadero de la empresa.
Además, para conseguir bombonas de gas deben esperar que el consejo comunal de cada zona informe sobre la venta de los cilindros. O incluso, contactar a alguna persona que haga la reventa de los mismos. Pero, las que se logran conseguir en estos casos son los cilindros de 10 kg, lo que genera que los habitantes necesiten cilindros con más frecuencia.
“El consejo comunal nos surte de bombonas cada cierto tiempo. A veces puede ser en 3 semanas, pero en otras oportunidades, solo una vez al mes o incluso cada dos o tres meses”, afirmó un habitante de la zona sur de Barquisimeto.
Precios de las bombonas al sur de Barquisimeto
En el caso del precio, varía mucho. Generalmente son 5 dólares, pero también depende de lo que quiera exigir la persona que tiene la bombona de gas. Es decir, puede aumentar el precio por ser revendida.
“Los cilindros de empresas anteriores los tenemos de adorno porque estas bombonas no se pueden recargar ni cambiar con ninguna otra empresa. Esto nos complica mucho la realidad del gas”, dijo Carlos, habitante de la zona Sur.
Además, destacó que esto les genera muchos inconvenientes como la tala de árboles en el Monumento Natural de Lomas de León. Pues, las personas acuden a dicho monumento a buscar leña para poder preparar los alimentos.
Cocinar con leña ha ocasionado diversas afecciones respiratorias a los habitantes, sobre todo a quienes padecen de asma. Hay personas que han logrado comprar o hacer cocinas eléctricas como medio alterno a la falta de bombonas de gas, pero esto deja de ser apoyo cuando se les va la energía eléctrica.